Para evaluar a posibles inquilinos, es fundamental verificar sus ingresos, revisar su historial laboral y solicitar referencias anteriores para asegurar su capacidad de pago y responsabilidad. Considera también su actitud, motivos de mudanza y estilo de vida, ya que estos factores influyen en la convivencia y cuidado de la propiedad. Realizar entrevistas y revisar la disponibilidad de mudanza pueden ayudarte a elegir al inquilino adecuado y prevenir futuros problemas.